Los reactivos de detección múltiple del virus respiratorio sincitial (VSR) de Beier respaldan la detección precisa del VSR.

El virus respiratorio sincitial (VRS) es uno de los principales patógenos que amenazan la salud de ancianos y bebés. Es un virus respiratorio común y altamente contagioso. Los humanos son los únicos huéspedes del VRS, y personas de todas las edades pueden infectarse. Entre ellos, los bebés menores de 4 años son la principal población afectada, lo que lo convierte en la causa más común de neumonía y bronquiolitis en bebés. Por lo general, los bebés menores de 1 año son más propensos a sufrir casos graves, algunos incluso menores de 8 meses. Las personas mayores de 65 o 70 años también son grupos de alto riesgo, y el VRS se ha convertido gradualmente en uno de los principales patógenos que ponen en peligro la salud de los ancianos y los bebés.

El VSR es altamente contagioso y generalmente se transmite a través de secreciones de los ojos, la nariz o la boca, con un período de incubación de 2 a 8 días.

Síntomas de la infección por VRS

El período de incubación de la infección por VRS suele ser de 2 a 8 días. Tras la infección, los síntomas iniciales de las vías respiratorias superiores, como fiebre, estornudos y congestión nasal, son similares a los del resfriado común. Unos días después, pueden presentarse bronquiolitis, neumonía aguda, dificultad para respirar e hipoxemia. Los casos graves pueden presentarse con síndrome asmático, obstrucción respiratoria y atelectasia. Las personas mayores con enfermedades subyacentes e inmunodeficiencia son propensas a desarrollar neumonía grave, otitis media aguda u otitis media postinfección, e incluso la muerte.

Métodos de detección clínica de la infección por VRS

La infección por VRS puede causar diversas enfermedades respiratorias, y los síntomas resultantes son similares a los de otros patógenos. Por lo tanto, es difícil diagnosticar basándose únicamente en los síntomas clínicos. Por ello, el diagnóstico de laboratorio cobra especial importancia. Una semana después de la infección viral, se pueden detectar anticuerpos IgM contra el VRS en el suero, que aumentan gradualmente y persisten durante varias semanas o meses antes de disminuir gradualmente y desaparecer. Por lo tanto, la detección de anticuerpos IgM es adecuada para el diagnóstico precoz.

Los reactivos de detección múltiple de VRS de Beier respaldan una detección precisa del VRS

Beier se ha dedicado a la investigación de patógenos respiratorios durante 13 años. Sus metodologías de detección del VRS incluyen la prueba de anticuerpos IgM contra el VRS y la prueba de ácidos nucleicos. Estas metodologías abarcan la prueba rápida de oro coloidal POCT, la prueba automatizada de alto rendimiento por quimioluminiscencia de partículas magnéticas y la prueba ELISA, aplicables a diferentes escenarios.